Como todos los años eras fiel a su cita, este año me sorprendí al verte tan pronto, sinceramente esperaba encontrarte ya entrada la madrugada del martes en un balcón junto a Curro Andrés... donde el quejio y la saeta se funden entre lagrimas de fieles devotos y el incienso que abarca el poco espacio que quedaba entre tú y ella... entre ella y tú. Esa a la que le cantes como a nadie.. a esa a la que le reinventaste con un arte sin igual la letra.... ¨
No hay ninguna como tú
Que toas tienen pena
pero ninguna como la tuya.
A tu hija la esperaba por jarreria cuando ya las monjitas comendadoras le decían hasta muy prontito a su joya más preciada, pero no te acompañaba junto a tu esposa y tu hijo más pequeño. La familia al completo venia a rendir culto a su manera, a hacer su peculiar estación de penitencia a la que consideraban su hermandad, y su virgen..
Mis pensamientos estaban en otras cosas... Todo el año esperando ese día y llovia, mi suegro ingresado en el hospital ...Cuando me dirijo hacia la calle intentando evacuar el compás del convento ya que este año no me tocaba la salida, y poder obtener un lugar de privilegio para poder ver la salida observo atónito como se ponen delante del paso de palio y a modo de coral le interpretaron una peculiarísima saeta a María Santísima de la Amargura.
Al concluir tuve la oportunidad de intercambiar con el unas breves palabras, y se mostro tan cercano y amable como siempre fue con el que escribe.
Hoy es un día aciago para los amantes del arte, del flamenco, hoy es un día aciago para la Ciudad de Granada y la Hermandad de la Oración en el Huerto de los Olivos y María Santísima de la Amargura. Se ha ido un personaje único e irremplazable.
Descanse en paz MAESTRO en el Getsemaní infinito bajo el manto protector de tu AMARGURA
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