domingo, 23 de octubre de 2011

Chenel


Antonio Chenel Albadalejo, Antoñete (Madrid, 24 de junio de 1932 - Majadahonda, Madrid, 22 de octubre de 2011)

En la tarde de ayer se fue un maestro de maestros, en esto de lo que queda de tauromaquia. Un torero más que singular, su carrera fue como el Guadiana. Aparecía y desaparecía. Castigado por las lesiones de huesos a raíz de haber nacido en la post-guerra. Embeleso al respetable a finales de los 60. Cautivo al gentío en su reaparición de los 80. Con el se va el clasicismo por excelencia. La faena justa y medida. El convertir en una filigrana un doblón por abajo. Convertir en su sello personal cuando citaba al toro a unos veinte metros y se lo traía ceñido a la cintura. Se va un genio que, bajo los humos a los ¨sin barbas¨ que mandaban en esa época Capea, Paquirri o Espartaco....Se ha muerto el del mechón blanco que me encandilaba de niño cuando lo veía por la televisión publica en una faena de Fallas o Isidril,y con el que aprendí más tarde en canal plus y en las madrugadas de radio...
La fiesta esta de luto mayor, porque se ha ido un catedrático de la tauromaquia y de la vida.

Descanse en Paz querido maestro. Y desde esta humilde ventana reciba mi reconocimiento como uno de los más grandes de la historia de la tauromaquia

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